¿Qué costos me corresponden en el leasing habitacional?

El leasing habitacional es una alternativa para adquirir vivienda en la cual usted (el locatario) firma un contrato de arrendamiento a largo plazo con el banco (el arrendatario), que tiene la propiedad del inmueble como garantía de la operación financiera. Además, desde el inicio del contrato se puede acordar la opción de comprar la propiedad cuando finalice el periodo acordado.

La figura del leasing puede generar cierta confusión sobre “quién debe pagar que”, dado que se podría asumir que aplican las mismas condiciones de en un arrendamiento tradicional; sin embargo, las condiciones sí son diferentes.

Costos que asume el cliente en el leasing habitacional

El leasing habitacional tiene características particulares que incluyen responsabilidades u obligaciones que adquiere el locatario, así el inmueble esté a nombre del banco. Algunas de las más comunes son las siguientes.

Impuestos y seguros: usted es responsable de pagar el impuesto predial y seguros asociados a la operación financiera, como el seguro de vida grupo deudor y el seguro de incendio y terremoto.

Tarifas de administración: se cobra en algunos inmuebles con el fin de cubrir los costos de mantenimiento, limpieza, seguridad y servicios compartidos que benefician a todos los residentes.

Valorización: es una contribución para financiar obras de interés público que también aumentan el valor del inmueble, por ejemplo, túneles, andenes, puentes, entre otros.

Costos de mantenimiento y reparaciones: incluyen los gastos periódicos para preservar la funcionalidad y apariencia del inmueble, desde pequeñas reparaciones hasta el cuidado preventivo de sistemas y estructuras.

Servicios públicos: todos los servicios esenciales, más lo que usted decida
instalar en el inmueble.

Finalmente, recuerde que el leasing habitacional tiene múltiples beneficios, como un mayor porcentaje de financiación (que podría llegar al 90%), ventajas tributarias y, en algunos casos, menores tasas de interés.